Pregunta:
Favor de explicar Santiago 1:27.
Respuesta:
Comencemos con el caso de las viudas porque 1 Timoteo 5:3-16 nos presenta más detalles sobre la ayuda a las viudas. El versículo 16 parece dejar totalmente claro que es debe de la iglesia ayudar a las viudas que no tengan familia que las pueda apoyar: “Si alguna creyente tiene viudas en la familia, que las mantenga, y que LA IGLESIA no lleve la carga para que PUEDA AYUDAR a las que en verdad son viudas”.
Volviendo a Santiago 1:27, ¿quiere decir que el cristiano debe practicar “la religión pura y sin mácula” pero no la iglesia en conjunto? ¿No trata Santiago de la iglesia congregada en los versículos que siguen inmediatamente a 1:27? “Si en vuestra CONGREGACIÓN entra un hombre con anillo…” (Santiago 2:2-4). ¿Cómo saben algunos hermanos que lo que dice en 2:2 es aplicable a la iglesia congregada mas no lo que enseña sobre la religión pura en 1:27? En el capítulo 3 se refiere a los maestros en la congregación y los desacuerdos entre hermanos en la congregación.
La realidad es que no es posible hacer tal distinción entre las instrucciones bíblicas. La iglesia no es una institución sino una familia compuesta de hermanos y hermanas. Ella es un cuerpo compuesto de miembros distintos. Como individuos y como familia tenemos la obligación de hacer lo que podemos para cumplir con la voluntad de Dios. Cada miembro contribuye lo que puede para que el cuerpo entero sea fortalecido y Dios sea glorificado (vea Efesios 4:14-16). Combinamos nuestros recursos en la ofrenda dominical para llevar a cabo la obra que Dios ha dado a cada uno y así mismo a la iglesia en conjunto (la familia de Dios, el cuerpo de Cristo). Este es el modelo que tenemos desde 1 Corintios 16:1,2 y refleja también lo que hacía la iglesia primera en la ciudad de Jerusalén: combinaban sus recursos bajo los guías siervos de la iglesia (los apóstoles) para obras de benevolencia y otras (Hechos 2:44,45; 4:32-37).
La evidencia bíblica sencillamente no hace la distinción que quieren hacer estos hermanos para ciertas obras como lo es la ayuda para las viudas y los huérfanos. No nos especifica los métodos que debemos aprovechar, pero sí deja a la iglesia (individuos y en conjunto) esta responsabilidad.