¿La ofrenda es mandamiento o tradición?

Pregunta: 

¿Es mandamiento de Dios que ofrendemos? Algunos enseñan que la ofrenda no es mandamiento de Dios. Dicen que los primeros cristianos recogieron un donativo que concluyó, pero que hoy día es tradición y mandamiento de hombres. Citan Romanos 15:28; I Corintios 6:2,3; Hechos 11:28-30; Marcos 7:6-13.

 


Respuesta:

Todo buen estudiante de la Biblia sabe que los cristianos en Galacia, Macedonia, Antioquía, Corinto y quizá otros lugares enviaron una ayuda a los hermanos que habitaban en Judea debido a una gran hambre que vino sobre ellos en tiempo de Claudio (Hechos 11:28-30; II Corintios 8; I Corintios 16:1-3). Lo que el apóstol Pablo POR INSPIRACIÓN DEL ESPÍRITU SANTO establece en I Corintios 16:1,2 es LA MANERA en que cristianos debe OFRENDAR para suplir esta necesidad. No quería que esperaran hasta la llegada de Pablo para ver entonces cómo recogían algo para los hermanos necesitados. Tenían que ofrendar algo cada primer día de la semana conforme a la prosperidad que Dios les había dado en la semana anterior. La iglesia tenía que guardar esta ofrenda hasta la llegada de Pablo, para que estuviera lista para ser enviada a los hermanos en Jerusalén. Era ORDEN o sea MANDAMIENTO hacerlo ASÍ (I Corintios 16:1) no solamente en Corinto sino también en Galacia y todas las iglesias de Cristo..

EL ERROR está en suponer que esta fuera la ÚNICA OCASIÓN EN LA CUAL OFRENDARON LOS PRIMEROS CRISTIANOS. Lo habían hecho antes para suplir una necesidad en la iglesia en Jerusalén, AÑOS antes de la conversión de Pablo (Hechos 4:34,35). La iglesia en Filipos lo había hecho también para suplir las necesidades personales del apóstol Pablo en sus viajes para la predicación del evangelio de Cristo (Filipenses 4:15-18). El apóstol Pablo nos manda en Gálatas 6:10 hacer bien a todos en sus necesidades. Santiago nos exhorta a cuidar a los huérfanos y las viudas especialmente (Santiago 1:27). Pablo enseña lo mismo en cuanto a la ayuda material que hay que dar a ciertas viudas en I Timoteo 5:13-16. La iglesia en Jerusalén hacía esto cada día (Hechos 6:1-7). La iglesia también debe proveer para las necesidades materiales de aquellos hermanos que escogen para dedicar todo su tiempo a la enseñanza de la Palabra de Dios (I Corintios 9:1-14). Esto es MANDAMIENTO DEL SEÑOR (I Corintios 9:14). Aunque Pablo no recibió salario de estos cristianos corintios, estaba recibiendo de otras congregaciones (II Corintios 11:7-9) como la iglesia en Filipos (Filipenses 4:15-18). Si no había ofrenda, ¿cómo hacían estos cristianos para proveer para estas necesidades MATERIALES?

La verdad es que la ofrenda tendrá que continuar por el mismo tiempo que continúen las NECESIDADES, las OBRAS que la iglesia del Señor DEBE HACER. La ofrenda establecida por el Espíritu Santo en la iglesia en Corinto iba a servir para "TODA BUENA OBRA". Léalo en II Corintios 9:8. Les animaba a ofrendar en esta ocasión con toda liberalidad o sea generosidad. Estaba seguro que mediante el poder de Dios ellos tendrían SIEMPRE todo lo suficiente para seguir supliendo lo necesario PARA TODA BUENA OBRA por medio de una ofrenda generosa. Esta contribución NO era ocasión ÚNICA sino que en seguida, como parte de su OBEDIENCIA al evangelio de Cristo, iba a servir para otras necesidades (lea II Corintios 9:12,13).

Mientras haya alguna necesidad que la iglesia debe suplir para manifestar el amor de Cristo, habrá necesidad de la ofrenda para los santos. Mientras haya alguna buena obra que la iglesia debe hacer en obediencia a Cristo, habrá necesidad de la ofrenda de cada primer día de la semana establecida por inspiración del Espíritu Santo como mandamiento de Dios.

La ofrenda autorizada en I Corintios 16 era para hacer la obra que Dios dejó a su iglesia. Esta autorización queda en pie para la iglesia del Señor si sigue haciendo la obra que Dios nos ha dejado. No tenemos autorización divina para hacer colecta de alguna otra manera. Cuando la iglesia del Señor tuvo necesidad de hacer coleta, el Espíritu Santo inspiró a Pablo para que escribiera estas instrucciones que tenemos en I Corintios 16:1,2. No seguir estas instrucciones cuando tenemos necesidad de hacer colecta para hacer BUENAS OBRAS en nombre de Cristo como iglesia de Cristo es DESOBEDECER A DIOS. Las buenas obras que Dios quiere que hagamos son: hacer discípulos, bautizarlos, enseñar luego todo lo que Cristo manda para edificación de la iglesia, ayudar a los necesitados – en fin glorificar Su Nombre. Si necesitamos fondos para hacer estas buenas obras (y casi siempre se necesitan), necesitamos OFRENDAR como Dios nos ha autorizado en Su Palabra.